Spoiler: esta publicación es una catarsis.
Al fin me registré para la vacuna, y al ver a otras generaciones en la misma fila pensé que nuestros padres jamás hubieran imaginado que un día nuestras vidas serían tan distintas a las de ellos, para después converger en un punto medio, todo gracias al internet.
Tenía unos 13 o 14 años cuando fui por primera vez a un cibercafé para abrir mi primera cuenta de hotmail y la recuerdo bastante bien: tenía más de 30 caracteres, era friki y terminaba en 666 porque era una adolescente muy darks. Pero desde ese día cambió 5 aspectos de mi introvertida vida:
- Entretenimiento
- Educación
- Trabajo
- Pareja
- Mis amigos
Internet es parte básica del día a día para la sociedad que tiene acceso a la información. Aún no son muchos pero, la tendencia sigue incrementándose. Y a partir de marzo de 2020, la demanda por parte de la población creció exponencialmente dejando en evidencia que también hay una amplia brecha digital.
El estudio Digital 2021: Global Overview report publicado por Data Reportal dice que el 59.5% de la población en el mundo tiene acceso a internet, y esta bonita gráfica de Stadista lo ilustra mucho mejor:
En México la situación no es muy diferente, la Asociación de Internet MX, publicó en el 17° Estudio sobre los Hábitos de los Usuarios de Internet en México 2021 que durante el 2020, somos unos 86.8 millones de personas con acceso a una conexión a internet, y desde los últimos 5 años esto se ha mantenido con un crecimiento anual del 10.2%.
Somos muchos, es verdad, pero también queda una brecha que hay que cubrir para brindar acceso a la información al resto de usuarios que declaró que no tenía una conexión por falta de recursos o interés.
Pero volvamos al pasado, cuando esto recién iniciaba y jugábamos insertando comandos en MS-DOS en la escuela, porque tener una computadora con acceso a internet era algo para gente privilegiada (y obvio yo no tenía).
Pero esto ya había comenzado:
1._Entretenimiento
En mi infancia temprana, la televisión estaba educándonos viendo «Los Picapiedra» y «Scooby Doo» unas 5 veces por semana, todas las semanas. Los juguetes que anhelábamos eran los que veíamos en la televisión (que claro, no tuvimos). Mis padres crecieron viendo la carabina de Ambrosio y el chavo del ocho una y otra vez.
Jugar afuera y las pláticas, estaban centradas en la familia y los amigos cercanos, que complementábamos con las frases de los shows de televisión o telenovelas.
Ellos leían “Condorito” y en mi infancia, leía cómics que me prestaban o que podía hojear en los puestos de revistas. Pero en línea, en foros y sitios como los wiki de fans, podía encontrar las sagas, continuaciones e historias fantásticas que tanto me gustan.
Quizá hoy cambiamos el chavo de ocho por streamers o tiktokers, chistes efímeros y memes que mañana quedarán cancelados, pero por fortuna el abanico es mucho más amplio. No importa lo raro sea nuestro hobbie, podemos encontrar una información y una comunidad.
2._ Educación
La creencia familiar solía ser: Ahorra para una matrícula, por que eso que quieres aprender, solo lo enseñan en tal ciudad, y no te puedes ir aún.
Sin internet, mi papá lo hacía a su modo: leyendo en la biblioteca, consiguiendo libros de otras partes del mundo o periódicos y revistas publicados en otras ciudades. El fin era el mismo: comparar fuentes de información y seguir aprendiendo.
Estoy orgullosa de mi alma mater y de todo lo que aprendí en mi época escolarizada, pero poder aprender algo a mi ritmo a través del aprendizaje en línea, me parece una forma más eficaz de poner en práctica la disciplina propia. También es una ventaja para que las personas que terminamos la universidad hace algunos años, podamos estar actualizadas más rápido en este mundo tan loco.
No importa la parte del mundo en la que te encuentres, para casi todo hay un tutorial o un curso en línea, solo debemos buscar.
3._ Trabajo
Más allá de que manejar una computadora y tener conocimiento de las TICs es lo que nos da trabajo a muchos, la forma de encontrar ese trabajo fue lo que cambió.
Algunos de mis conocidos van a las empresas y dejan su curriculum con los guardias de seguridad, o asisten a eventos de networking para crear relaciones personales y profesionales con las personas y así poder conseguir una vacante. Y creo que este método es muy efectivo en una sociedad como la nuestra, que premia la extroversión.
Para personas un poco más calladas, el hecho de que un algoritmo a través de LinkedIn considere que somos los candidatos para alguna vacante y que por medio de plataformas de ese tipo podamos explorar todas las posibilidades disponibles, es muy útil para los de personalidad introvertida que preferimos guardar nuestra energía para la entrevista.
4._ Pareja
Que curioso que en un lugar lleno de piratería, encontramos lo más auténtico de nuestras vidas
Mi vato, en la boda de su mejor amigo (al que también conoció en línea).
Nos casamos oficialmente en un registro civil hace unos 4 años, pero ante las personas del internet y los virus troyanos que habitaban en nuestras computadoras, nuestra primera boda fue en 2006 en un juego llamado Ragnarok Online o RO para los amigos (decíamos que era como League of Legends para pobres).
Nos conocimos en el chat de una plataforma en la que intentábamos descargar música y películas de las bibliotecas de otras personas (con algunos virus por medio). Hoy es muy común escuchar que las parejas se conocen en línea y llevan una relación a distancia (hasta hay apps para eso), pero en nuestras épocas adolescentes, para mis padres que se conocieron porque eran vecinos, les costó un poco aceptar que esto era algo serio.
5._ Amigos
Una de las grandes ventajas para los introvertidos que vivíamos en ciudades pequeñas, es que no importa lo raro sea nuestro hobbie, o lo que se quiera aprender, en línea es posible encontrar una comunidad que podrá acompañarnos.
Antes de las redes sociales y de que los foros se convirtieran en un pozo negro de hate, se podían entablar conversaciones personales y enriquecedoras con desconocidos con los que compartía los mismos gustos e intereses. Tuve la suerte de conocer personas que no eran ningún pervertido encubierto. Aún conservo muchas de esas amistades.
También hay historias bonitas de la actualidad, como las ARMYs y gente que salva empresas en bancarrota en Reddit:
A mi mejor amiga no la conocí en línea, pero ambas asistimos a la misma clase de HTML y en la preparatoria; así que punto para el internet.
La otra cara es que ya no confío ciegamente en los desconocidos en línea, y trato de convencer a mis padres de que tampoco lo hagan a la primera y no revelen información personal en redes sociales. Quizá ni siquiera son personas y solo estamos peleando con bots de alguna granja en la India.
Pero bueno, aquí estoy, contando la historia de mi vida en un blog público.